Rosa Muñoz trabaja una doble vertiente creativa: la instalación escenográfica y el registro fotográfico de esa instalación. Elaborados montajes de ambientación teatral cuya iluminación adquiere un protagonismo dominante. Obra marcada por la potencia de los colores y por una composición equilibrada. Rosa Muñoz crea un mundo imaginativo compuesto a base de visiones idealistas.
Rosa Muñoz construye espacios, imágenes donde conviven la irrealidad, lo poético y la sugerencia. Escenas de un mundo ideal para que lo habiten los soñadores, los que se evaden, aquellos quienes viven con el deseo de un universo de atmósfera silenciosa. Un mundo de colores vivos. Rosa Muñoz reivindica la presencia de la naturaleza como elemento primordial de belleza y recurre a elementos cotidianos para recuperar nostalgias. ”Lo que me interesa es realizar cierta trasgresión de la realidad para hacerla más sugerente”.